Un buen cóctel es la mejor carta de presentación de un restaurante o un bar. Éstas bebidas combinan arte y ciencia, ya que hay que conocer bien qué cantidades mezclar y a qué temperaturas. Un profesional experimentado es capaz de crear combinados de un sabor espectacular. Nada mejor que conocer algunos trucos para iniciarse a alcanzar tales cotas de calidad.
Cinco trucos de todo buen coctelero
Para realizar un buen cóctel debemos conocer en profundidad las bebidas, pero también las cocteleras, varillas y técnicas utilizadas por los mejores. De otro modo no llegaríamos al nivel requerido para que los clientes queden satisfechos del todo. Así, pasamos a desgranar los mejores trucos para sorprender con un buen cóctel.
1. No añadir demasiado refresco
Cuando elaboramos un combinado lo ideal es que los licores sean los protagonistas. Si añadimos demasiado refresco el sabor de las principales bebidas se verá opacado, y eso afectará a la experiencia del cliente. Además, los que lleven años probando un cóctel concreto notarán hasta el mínimo cambio en su sabor, por lo que hay que tener cuidado con las proporciones.
2. La temperatura exacta
La temperatura es clave para lograr el combinado. El hielo ayuda a refrigerar la copa, pero podemos recurrir a un truco. Si enfriamos la copa antes de servir el cóctel, el sabor aumentará. También hay que tener en cuenta que algunos necesitan cubitos de hielo de un tamaño y forma determinados, por lo que habrá que recurrir a maquinarias para restaurante específicas para obtenerlos.
3. Los adornos
Muchos combinados cuentan con adornos. Por ejemplo, el manhattan suele llevar una cereza marrasquino, y el margarita una rodaja de lima. Lo normal es que todos traten de emular esa estética clásica, pero lo que no debemos hacer en ningún caso es recargar el combinado con demasiados accesorios. Hay que añadir los justos, que sean coquetos y aporten un toque de creatividad o sigan la tradición de esa bebida, sin más. Bajo ningún concepto entorpeceremos al consumidor el probar su combinado.
4. No vale cualquier bebida
Un buen cóctel requiere de bebidas de calidad, nada de sucedáneos o imitaciones. Si no contamos con licores de primera, el combinado perderá parte de su esencia y sabor. Además, estas deben mantener su frescura. No es lo mismo un licor recién comprado que uno que lleve años en la estantería sin usarse. Quizás ganen en sabor, pero se van a dar pérdidas de calidad si no se están conservando adecuadamente.
5. El orden de los ingredientes
Agregar todos los ingredientes a la vez es un grave error. Estos deben entrar en la coctelera en un determinado orden y cantidad, o de otro modo no se mezclarán de la manera adecuada. Primero se añadiría el hielo, luego los ingredientes menores y, al final, las bebidas alcohólicas de menor a mayor gradación.
Y es que, como sabemos, un buen cóctel requiere de ingredientes de calidad en su justa medida y del conocimiento y experiencia de un buen barman a la hora de elaborarlo y servirlo. Tal complejidad es la única llave para conseguir mezclas sorprendentes, de gran sabor y que colmen las exigencias de cada gusto.